¿Necesitamos un «Rescatador» para los pacientes durante el proceso de diagnóstico?

Cada sistema de salud es local, pero el problema es global

Los pacientes y familias emplean en ocasiones varias visitas y mucho tiempo para tener una respuesta a sus problemas de salud. A lo largo de este camino de incertidumbre , nadie podría medir la ansiedad, impotencia, incluso desesperación, junto con una pérdida deinformación sobre un procedimiento para reclamar o alguien a quien preguntar. ¿Podemos hacer algo más para ayudar a los pacientes en esta situación no tan infrecuente? Probablemente este tema no se asocia con un tipo concreto de sistema de salud, público o privado, porque el momento clave para el paciente es el encuentro con un médico que tendrá que decidir si el cuadro clínico merece más estudio diagnóstico o puede ser suficiente con un tratamiento sintomático.

Organizar el sistema de visitas es importante, pero la experiencia clínica lo es más

Los retrasos diagnósticos son analizados de una forma retrospectiva por definición, pero no hay un esquema definido para ello. Hay información sobre «modelos» para estudiar el retraso diagnóstico en cáncer.  Hay tres modelos básicos para estudiar la asistencia a los pacientes con cáncer en la literatura, el modelo de Safer (1), el modelos de Andersen (2), ampliamente utilizado en las publicaciones, y el tercer modelo procedente del campo de la Medicina General, el modelo de Olsen (3) desarrollado en Dinamarca.

En todos estos modelos hay cierta asunción de que, una vez que el paciente contacta con un médico, todo va a ser correcto y adecuado, y así la obligación para una persona o familia es la de contactar con el sistema, en una manera similar a lo que hacemos cuando debemos ir a tomar un tren.

Las puertas del Sistema

En nuestro medio hay dos importantes «puertas» en la que los pacientes se enfrentan con su inmediato futuro para obtener un diagnóstico adecuado: el Centro de Salud o Atención Primaria y el Servicio de Urgencias, ambos sobrecargados y trabajando con alta presión. La dificultad para realizar un diagnóstico en estas estas estructuras está asociada, no sólo con la organización para favorecer el mismo, sino tambien con la propia peculiaridad de cada enfermedad, sobre todo cuando sabemos que enfermedades diferentes y con diferente pronóstico pueden presentarse con síntomas parecidos. Suelen existir variables comunes relacionadas con un error o retraso diagnóstico, por ejemplo, la edad del paciente («un adolescente nunca tiene una enfermedad importante»), un anciano ( «todo está asociado con sus problemas crónicos»), género (el cáncer de vejiga y de laringe , suele diagnosticarse de forma más tardía en mujeres), o situaciones especiales como la obesidad.

Propuestas para mejorar la situación de «primer diagnóstico»

Hay datos que pueden predecir un posible retraso de diagnóstico teniendo en cuenta algunas variables, bien estudiadas y descritas en cáncer por Lyratzopoulos (4), según datos del Reino Unido que indican que la proporción de pacientes con un cáncer determinado con un número de tres o más visitas a una consulta de atención primaria antes de ser referidos a un especialista , pueden ser un grupo con una especial dificultad para el diagnóstico en la primera visita médica. Además, se ha demostrado que el número de visitas de pacientes que van a sufrir un retraso diagnóstico tienden a incrementarse en los meses previos al diagnóstico definitivo de cáncer. Estos resultados indican que el retraso diagnóstico en general puede reducirse mejorando la historia clínica, explicaciones acerca de los síntomas relacionados con la enfermedad, y sobre todo una política de «puertas abiertas» para los pacientes en los que persisten los síntomas (5), aspectos todos ellos relacionados con las habilidades clínicas del médico.

Desde nuestro punto de vista consideramos que un grupo de pacientes y familias, atascados en el proceso de diagnóstico, con varias visitas por el mismo problema al médico de cabecera o urgencias, necesitan ser «rescatados» de esta situación, a través de marcar un tiempo específico para el diagnóstico en Medicina General, y sobre todo evitar explicaciones diagnósticas absurdas.

Proponemos algunas ideas para disminuir el número de familias y pacientes que emplean más tiempo del debido y más ansiedad, a través de un proceso diagnóstico dificultoso e incierto, estructurando la organización para el diagnóstico, y sobre todo creando la figura o estructura del «rescatador» , cuando, bien a través de la detección informática, o bien por comunicación del propio paciente, se observa un incremento de visitas en un corto período de tiempo, para problemas persistentes.

Propuestas

  1. Establecer un tiempo y lugar concreto para pacientes de primera visita, diferenciados del resto de los que acuden a consulta de Medicina General.

2. Debe existir personal médico experto y específico para este momento de diagnóstico.

3.  Sobre todo, proponemos una nueva figura o estructura, el «Rescatador o Equipo de Rescate» de pacientes inmersos en un proceso de diagnóstico con señales que pueden ser indicativas de un posible retraso o error de diagnóstico.  Como hemos explicado previamente, algunas de las condiciones que deben cumplir estos individuos o pacientes serían:

  • número de visitas: más de tres visitas a un área médica en relación a los mismos signos y síntomas en un corto período de tiempo (no más de mes y medio), MÁS
  • síntomas que podrían indicar un problema de diagnóstico importante: síndrome constitucional, hemorragia, fiebre mantenida, disnea, náuseas y vómitos, cefalea intensa persistente.
  • confidencialidad

Esta nueva propuesta no es una tarea fácil, ya que es verdad que podría producirse un «colapso» o mal funcionamiento en casos de exceso o pobre discriminación de situaciones clínicas, enmascarando al grupo de pacientes que necesitan ser «rescatados» verdaderamente.

Lorenzo Alonso, MD

Foro Osler

Bibliografía

(1) Safer MA, Tharps QJ, Jackson TC, Leventhal H. Determinants of Three Stages of Delay in Seeking Care at a Medical Clinic. Medical Care 1979; 17: 11-29)

(2) Andersen BL, Cacioppo JT. Delay in seeking a cancer diagnosis: Delay stages and psychophysiological comparison processes. Br J Soc Psychol 1995; 34: 33-52

(3)Olesen F, Hansen RP, Vedsted P. Delay in diagnosis: the experience in Denmark. Br J Cancer 2009; 101: S5-S8

(4) Lyratzopoulos G, Wardle J, Rubin G. Rethinking diagnostic delay in cancer: how difficult is the diagnosis?. BMJ 2014; 349: 1-6

(5)  Jensen H, Nissen A, Vedsted P. Quality deviations in cancer diagnosis: prevalence and time to diagnosis in general practice. British Journal of General Practice 2014; DOI: 10.3399/bjgp14X677149)

 

 

 

 

 

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