Comentario sobre un artículo: «Role of Artificial Intelligence Applications in Real-Life Clinical Practice: Systematic Review»

Introducción

Soy un clínico que trabaja todos los días con pacientes en una planta de Oncología, y me gustaría encontrar una herramienta para mejorar mis decisiones clínicas y la gestión diaria durante el proceso de diagnóstico con mis pacientes.

La Inteligencia Artificial (IA) es el nuevo concepto emergente, y las Instituciones y Facultades de Medicina están sufriendo un verdadero reto tratando de establecer un papel práctico para esta herramienta.

Buscando en el océano: Inteligencia Artificial y PubMed

Cuando quieres buscar información en Medicina, vas a PubMed. Si escribes (Artificial Intelligence) AND (Clinical Practice) AND (Systematic Review)», vas a obtener 301 resultados ahora mismo (octubre 2023), la mayoría publicados en los últimos tres años. Muchos artículos están dedicados a tareas específicas en relación con varias especialidades médicas como Dermatología, Cirugía, Oftalmología, Rehabilitación, Patología, pero sólo se han publicado unos pocos relativos a la aplicación al diagnóstico y razonamiento clínico en general en el mundo real de un clínico ocupado.

Gerentes y Directores de Departamento están muy interesados en esta herramienta basada en la capacidad de obtener información rápida y completa sobre «Big Data» y la relación con diversas variables que permiten predecir escenarios posibles, cuya modificación es importante conocer para aumentar el «negocio administrativo» en general. Pero, aquí, nos enfrentamos a uno de los peligros de esta importante herramienta, el «secuestro del Secreto» por parte de las Corporaciones y la Industria en general, sin una incorporación y evaluación de las posibilidades de aplicación en la práctica clínica, aquella que interacciona con la mejora de la atención a los pacientes en particular.

Comentario a un artículo publicado

Nos gustaría comentar aquí un artículo publicado por Yin J, Ngiam Ky, Teo HH en 2021 titulado «Role of Artificial Intelligence Applications in Real-Life Clinical Practice: Systematic Review» (1), porque los autores intentaron desentrañar la aplicación real de la IA a la medicina clínica.

Realizaron una búsqueda bibliográfica entre 2010 y 2020, cruzando las palabras «inteligencia artificial», «machine learning» con otras asociadas a implicaciones clínicas («clinical», «healthcare», «medical», etc). Inicialmente, obtuvieron 17.945 artículos de revistas, pero sólo quedaron 51 tras aplicar criterios de inclusión específicos.

Sólo unos pocos estudios evaluaban la IA en la práctica clínica, o bien tenían una aplicación directa en la atención a los pacientes y sólo 13 de ellos eran ensayos clínicos aleatorizados. La mayoría de los estudios trataban de validar conjuntos de datos retrospectivos anteriores en centros concretos o con datos recogidos previamente. Como detalle es digno de reseñar que la aplicación más clara hasta ahora, desde el punto de vista del diagnóstico, ha sido la capacidad de la IA para detectar la retinopatía diabética en estadios iniciales.

La conclusión de este artículo es que queda mucho trabajo por hacer, con una implicación más directa en el entorno clínico,y con objetivos clínicos, para pasar de la teoría a la práctica.

El valor intrínseco de la IA en Medicina

No hay duda de que la IA va a tener un gran impacto en la medicina clínica, pero su papel definitivo va a estar directamente ligado a la visión de utilidad para pacientes y sanitarios. Hemos tenido en los últimos años algunos ejemplos de la implicación del desarrollo computacional en el campo del pronóstico y la terapéutica en cáncer, y ahora somos capaces de detectar una mutación en una célula cancerosa de un paciente y, tras buscar en una gran base de datos, seleccionar un fármaco específico asociado a la mutación detectada. Además, las implicaciones sobre el pronóstico son claras, diferenciando subgrupos de entidades incluídas bajo un mismo epígrafe, como ocurre con el cáncer de mama, analizando y cruzando multitud de datos sobre la enfermedad y las características de los pacientes.

Pero, ¿qué podemos decir de la aplicación de la IA en el diagnóstico clínico en la práctica diaria? Hay precentes de herramientas de apoyo al diagnóstico, como la bien conocida «IsabelHealthcare», desarrollada en el mundo anglosajón, que no llegó a alcanzar la aplicación práctica prevista. Para dar una respuesta adecuada a la pregunta del inicio, tenemos que exponer dos características importantes del proceso de diagnóstico y ver como funciona la IA en relación a ellas: la cuestión de los sesgos cognitivos y el entorno de incertidumbre en el que trabaja un clínico.

Realmente no sabemos si la IA va a tener un impacto positivo en la reducción de los sesgos cognitivos, pero probablemente no va a haber una reducción absoluta de los mismos, porque en cierto modo el papel de la persona que busca la información y la discriminación y decisión tras considerar la información disponible, va a estar a cargo de un humano con sus conocimientos, emociones y personalidad.

Otra situación es la cuestión de la incertidumbre. Esta característica propia del proceso de diagnóstico está asociada, por un lado, a la cantidad de enfermedades clasificadas hasta ahora en Medicina, más de 10.000, y por otro con el hecho de que enfermedades diferentes en etiología y pronóstico, pueden compartir los mismos signos y síntomas. Aquí, la Inteligencia Artificial puede tener un papel importante, ayudando a los sanitarios a mejorar el diagnóstico diferencial, e incluso a desentrañar datos particulares de cada enfermedad, no sólo en la forma en que aparecieron en la clínica, sino también detectando pequeñas y definitivas diferencias en las pruebas de laboratorio e incluso en la evaluación patológica, discriminando entre datos diferenciadores a todos estos niveles mejor que la mente humana. Pero, para ello se requiere que la propia IA se nutra de datos clínicos reales, relacionados con el medio en el que se trabaja, y además, su implantación debe ser facilitada al clínico y de forma generalizada y accesible.

Conclusión

La Inteligencia Artificial, en diferentes aplicaciones, ya está presente en el mundo clínico, incorporada al software de radiología, reglas de decisión en cáncer, seguridad del paciente en cirugía, pero su papel se va a ampliar muy rápidamente. Creo que se deben priorizar dos áreas principales en Medicina, las Urgencias y los Centros de Salud de Medicina General, dos pilares básicos hoy en día de la actividad de la medicina moderna.

Autor: Dr. Lorenzo Alonso Carrión

FORO OSLER

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